En años recientes las personas han empezado a dar una oportunidad a las terapias complementarias como una alternativa muy interesante para sus tratamientos de salud. En ese orden de ideas, no todo se resume en una dieta saludable, sino en la incorporación de todo tipo de ayudas que pueden ser beneficiosas para el organismo.
¿Qué es una terapia complementaria?
Como concepto, una terapia complementaria se define como un conjunto de recursos de tipo terapéutico en donde se ofrece un enfoque distinto al de la medicina convencional. Ahora bien, es muy importante destacar que son complementarias, por ende, su objetivo no es reemplazar la medicina convencional.
Además de lo anterior, hay que recordar que la medicina convencional se implementa con base en investigaciones para verificar su seguridad y eficacia. En caso de las terapias complementarias, sus resultados son mixtos y hasta la fecha siguen siendo insuficientes, motivo por el que se deben aplicar con la supervisión de un profesional
Diferencia entre terapias complementarias y medicina alternativa
A grandes rasgos, hay que resaltar que la medicina alternativa busca reemplazar la medicina convencional, mientras que las terapias complementarias buscan justamente complementar la medicina convencional.
En ese orden de ideas, no es raro entonces que los profesionales del sector de la salud le recomienden a algunas personas que además de optar por los procesos sugeridos desde la medicina convencional, se complementen con esta clase de terapias.
Tipos de terapias complementarias
Lo cierto es que el caso de cada persona tiene sus especificidades y particularidades, razón por la que siempre se necesita del consejo de un experto que en verdad se encuentre calificado para proponer la terapia más adecuada. Más allá de lo anterior, las opciones más comunes son:
- Acupuntura – Consiste en la inserción de agujas en sitios muy específicos del cuerpo para que los impulsos nerviosos se estimulen.
- Aromaterapia – El objetivo consiste en utilizar aceites esenciales, además de brindar masajes o baños. Se piensa que estos aromas pueden producir un efecto de relajación.
- Terapia de masajes – Un terapeuta calificado va a frotar y manipular distintos tejidos blandos en el cuerpo, con lo que se logra promover el bienestar y la relajación del cuerpo. En ciertas ocasiones es muy adecuado para la reducción de la tensión en los músculos o lograr que las dolencias se calmen.
- Otras terapias – Está la reflexología, yoga, taichí, pilates, meditación, osteopatía, quiropráctica, homeopatía, biorretroalimentación, Qi gong, entre otros más.