El desayuno es considerado como la comida más importante del día, en ese sentido, sin importar que se trate de una dieta rápida y efectiva o de cualquier otro tipo de plan de alimentación, siempre es necesario que se preste mucha atención a cada una de sus características.
Reducir el colesterol en el desayuno
Teniendo en cuenta lo anterior y que en muchos casos suelen incrementar los niveles de colesterol en el desayuno, en este caso nos concentramos en compartir una serie de recomendaciones muy básicas para disminuir el colesterol el desayuno, y así permitir que el plan de alimentación sea mucho más equilibrado en este aspecto.
Avena para reducir el colesterol – Son muchas las investigaciones y observaciones que han confirmado lo anterior en distintas situaciones y con diferentes tipos de cuerpos. Asimismo, siempre se suele mencionar que la avena es uno de los alimentos más potentes para la reducción del colesterol LDL, comúnmente descrito como colesterol malo. La sugerencia en este caso es tan sencilla como combinar un plato de avena con una pieza de fruta, nueces y un plátano.
Aguacates para una dieta sana y saludable – Es una recomendación que en algunos casos suelen sorprender a las personas, ya que en ocasiones se menciona que se debe evitar el consumo de aguacate pues su contenido en colesterol es elevado. Ahora bien, la realidad nos dice que el aguacate es muy saludable para un plan de alimentación cualquier, lo que significa que es una fuente muy potente en nutrientes, ácidos grasos monoinsaturados y más. Prepare su desayuno con una tostada de pan integral y una rodaja de aguacate con tomate.
Limón y ajo para reducir el colesterol – Hay que ser mucho más exactos con esta propuesta, ya que en realidad se trata de una cura en la que se utilizan estos ingredientes como los elementos principales. De acuerdo con varios investigaciones y observaciones, se ha identificado que esta es una combinación muy adecuada para la salud, pues actúa como un antibiótico de origen natural, depurativo, diurético, antibacteriano y antiséptico. Sólo se necesita de un diente de ajo, el jugo de un limón y un vaso con agua. Sólo se debe calentar el vaso con agua para añadir el jugo de limón. Debe comer con anterioridad el diente de ajo y acto seguido consuma de una manera lenta el vaso de agua tibia con limón. Lo puede hacer entre dos a tres veces a la semana.